Las mujeres pueden tener orgasmos, habiendo o no sido penetradas por el pene

Las mujeres pueden tener orgasmos

Lucía, jovencita española, muy elegante y estudiante universitaria con mentalidad abierta a nuevas experiencias. Mana sensualidad a través de su cautivadora mirada y su encanto irreprimible. Toda una enorme tentación y un genuino lujo para todo aquel que aprecie el gozar del más alto nivel femenino. Su juventud y su carácter extravertido hacen que Lucía sea una enorme opción de compañía. ¿Así qué con quién mejor que con Lucía para pasar momentos llenos de lujuria, pasión y desenfreno inigualables? Actualmente, en cambio, se tiene un concepto rácano sobre la propiedad raíz. Los pisos son de mucho carácter, es decir, de una sola pieza, y el cónyuge que pretende no ver al otro tiene que desocupar, pues resulta imposible dar un paso sin encontrarse con el enemigo. Ciertas casas son, por su poquedad, un atentado criminal contra uno de los derechos humanos más sagrados: el derecho a contar con de manera libre de un territorio personal. Las alcaldías municipales, por esto, solo deben aprobar planes de residencia en que los arquitectos hayan proyectado tres zonas: la personal, la familiar y la social. Nuestras emociones y pulsiones están condicionadas por millones de años de evolución. Este es uno de los tantos problemas del amor. Nuestro cuerpo nos solicita lo que la cabeza nos niega. Singularmente a las mujeres, que son las más influidas por los procesos sensibles.

Una situación opción alternativa

¿Ángel o demonio? ¿Una relación apacible y cariñosa o una relación llena de aventuras? Soy Sasha, una apasionada amante que te sacará una sonrisa de felicidad una vez abandones nuestro íntimo lugar de encuentro … mi mirada es candente y, con ella, lograré que no haya hielo o distancia entre los dos y cuando comience a desvestirme irás descubriendo un pasmoso cuerpo que será todo para ti … Muchos comportamientos heteronormativos se imponen, formalizan y regulan por medio de las leyes. Otros, se han arraigado poco a poco a través de costumbres, tradiciones y roles sociales explícitos y también tácitos. Soy Mónica, una mujer con mucho embrujo y poseedora de una mirada capaz de quitarte los sentidos. Candente, sorprendente, hechizante ¿qué más podrías solicitar? puesto que tengo unas exuberantes posaderas que los caballeros no tratan de disimular y sin poderlo evitar, se viran para observar mis atrevidos movimientos e increíbles balanceos de caderas. Mas tengo más … esto tan solo es un pequeño anticipo. Generalmente los celos violan uno de las pilares virtudes que pueda conseguir cualquier matrimonio la confianza, pues estos traen sufrimiento para el que los siente pues presume que le están engañando, el otro padece al sentirse controlado, perseguido, censurado y agobiado. Con los celos se rompe la comunicación franca, se da inicio a malos tratos y a la violencia, se enfría el amor, se termina el gozo y la armonía de la convivencia diaria llevando estos en un porcentaje notable al divorcio. De todas maneras estos pequeños consejos pueden ser de ayuda si usted se siente celoso o calosa.

O funde sus colores con la ardiente rosa [4]

Estás frente a un patrón en el momento en que te lamentas de que siempre pasa X, todos son…, nadie…. Por ejemplo: siempre me dejan, todas las que me agradan solo me miran como un amigo, siempre me infravaloran, nunca me gusta nadie… El reportaje The Race to Nowhere: The Dark Side of America’s Achievement Culture [La carrera a ninguna : el lado obscuro de la cultura de Norteamérica del logro], que examina la inexorable presión ejercida sobre los chicos a fin de que tengan éxito, ha hecho mella en los educadores y los padres de todo el país, y no obstante la carrera continúa. Según el sitio web de la película, A través del testimonio de educadores, progenitores y expertos en educación, [el film] muestra un sistema educativo en el que la trampa se ha convertido en norma; los estudiantes no se involucran; proliferan las enfermedades relacionadas con el agobio, las depresiones y el agotamiento, y los jóvenes llegan a la universidad y al trabajo mal preparados y faltos de inspiración.2 Además de este reportaje, hay un elevado número de artículos, textos, weblogs y noticias sobre adolescentes que padecen ansiedad, y todos apuntan al problema de que los niños se sienten agobiados por las esperanzas relacionadas con el éxito académico, social y personal.

Ello te va a bastar para hacerte una idea de hasta qué punto puede ser fogosa esta hermosa mujer

David DeAngelo, en su escrito Dobla tus citas, argumenta que las mujeres desean un hombre que sostenga el control sobre sí mismo. Destaca que desdeñan a los hombres débiles, y se ven enclenques los hombres que les pueden dar cualquier cosa que les pidan. Los hombres, dice DeAngelo, comen de la mano de las mujeres y no vacilan en darles cuanto ellas demandan. Aquí vemos asimismo la Autoestima Vulnerable: puede ser por el deseo de conformarlas a cualquier costo, y también por el miedo a confundirse. Hacer todo lo que piden, semeja jugar a lo seguro, no pueden ofenderse si se hace eso: el miedo a la antiproeza muestra la Autoestima Débil. Una capa, en cierto modo superficial, de lo inconsciente es sin duda alguna personal. La designamos con el nombre de inconsciente personal. Mas esa capa descansa sobre otra más profunda que ya no procede de la experiencia personal ni constituye una adquisición propia, sino que es innata. Esa capa más profunda es lo de este modo llamado inconsciente colectivo. He elegido el término colectivo por el hecho de que tal inconsciente no es de naturaleza individual sino general, esto es, en contraste a la psique personal, tiene contenidos y formas de comportamiento que son iguales cum grano salis en todas y cada una s y en todos y cada uno de los individuos. Es, con otras palabras, idéntico a sí mismo en todos los hombres y de ahí que forma una base psíquica general de naturaleza suprapersonal que se da en todos y cada individuo Cita tomada de: Jung, Carl Gustav (2002). Obra completa volumen 9/I: Los arquetipos y lo inconsciente colectivo. Sobre los arquetipos de lo inconsciente colectivo. Madrid: Editorial Trotta. p. 3.